El municipio adquirió un cinemómetro móvil para controlar el exceso de velocidad
El exceso de velocidad en la ciudad comenzará a ser controlado con el cinemómetro móvil adquirido por el municipio a fines de avanzar en la creación de una cultura de conducción más acorde con el respeto por la vida. El aparato fue presentado esta mañana a los medios de prensa y a los agentes de Tránsito que lo utilizarán, con la correspondiente capacitación.
El secretario de Gobierno y Vinculación Comunitaria, Rafael Sachetto, destacó que se trata de una “innovación tecnológica que colaborará en los mecanismos de prevención de los accidentes de tránsito, interviniendo en una variable que influye en la accidentología como es el exceso de velocidad”.
Durante la jornada de hoy y la de mañana, los agentes de Tránsito serán capacitados en el uso el equipo, para comenzar luego con su implementación. Según explicó el funcionario, se informará que se está efectuando un control en el área de acción, dado que lo que se busca es “corregir las actitudes y transformarlas en una buena práctica vial”. En ese mismo sentido, durante la primera semana de utilización del cinemómetro, las multas se realizarán pero no se cobrará a los infractores, que sí serán notificados.
Los controles se realizarán tanto en avenidas y accesos de la ciudad como en las calles interiores. De acuerdo a la normativa vigente, las velocidades máximas permitidas son de 60 kilómetros por hora para el ingreso a la ciudad, 50 para avenidas y 40 para las calles.
El intendente Martín Gill, en tanto, señaló que la nueva incorporación permite equipar al poder de policía municipal, garantizando tanto al municipio como a los ciudadanos e infractores que se actúa con un criterio de justicia.
Cómo funciona
El equipo, que cuenta con las certificaciones y homologaciones exigidas, asemeja a una cámara de filmación para uso doméstico, y cuenta con un trípode para su emplazamiento en diferentes arterias. Según explicaron los representantes de la firma proveedora, T&M Export S.R.L., el cinemómetro detecta los vehículos que superan la máxima permitida y, sólo en esos casos, toma un video y una fotografía, ambos de muy alta definición.
Ese registro es inviolable, y permite establecer con un margen altísimo de confiabilidad que la infracción efectivamente se cometió. El conductor es notificado en el momento o posteriormente, y la multa se gestiona en la Justicia de Faltas.
Cabe señalar que la ordenanza que estableció la Emergencia Vial en la ciudad prevé la adquisición de mayor equipamiento para el área. De esta forma, el municipio está evaluando la colocación de cámaras en semáforos para controlar el paso en rojo, otra de las faltas más graves por el riesgo de accidente que conlleva.