Con un acto virtual, autoridades y ex combatientes conmemoraron el Día del Veterano y de los Caídos en Malvinas
El municipio y el Centro de Veteranos de Guerra Islas Malvinas llevaron adelante un acto virtual por el 38º aniversario del desembarco en las islas del Atlántico Sur. Se trató de una videoconferencia en la que se sumaron ex combatientes, concejales, funcionarios y representantes de instituciones.
El epicentro del acto virtual fue el Salón Blanco de la sede municipal, desde donde se conectaron el presidente del Concejo Deliberante en ejercicio de Ejecutivo, Pablo Rosso; el jefe de Gabinete, Héctor Muñoz, y el obispo Samuel Jofré Giraudo.
Desde sus hogares, cumpliendo con el aislamiento social preventivo y obligatorio decretado a nivel nacional para mermar los efectos de la pandemia COVID-19, se conectaron y siguieron las alternativas del acto veteranos de guerra, familiares de ex combatientes y de caídos en el conflicto bélico, además de funcionarios y concejales.
Rosso expresó a los veteranos que “la admiración del pueblo por lo que hicieron esos hombres aquel 2 de abril se fue consolidando con el tiempo”. Y precisó que “como miembros de esta sociedad, sobre nuestras conciencias llevamos la necesidad de hacer saber a las futuras generaciones que por ustedes hemos sido fortalecidos con el valor de la solidaridad”.
Seguidamente, reflexionó acerca de “la importancia que tienen en la vida de los pueblos las situaciones límite, ya sean producto de la naturaleza o de las decisiones de los hombres”. En esa línea de pensamiento, vinculó lo que tuvieron que vivir los jóvenes que marcharon a la guerra en 1982 con la amenaza actual centrada en la pandemia.
En ese sentido, expresó que la importancia de estos procesos está dada por “lo que podemos aprender, trabajando juntos y reconociendo los errores para no volver a cometerlos”.
“Hoy estamos dando la batalla con la única vacuna que tenemos, que es tratando de que la gente se quede en casa. Para eso estamos trabajando contrareloj en la articulación del sistema público y privado, y lo hacemos convencidos de que el dialogo es lo esencial para transitar de la mejor manera esta instancia”, valoró Rosso refiriéndose a la actual situación que atraviesa la ciudad y el país entero, una temática que atravesó los discursos de todos los oradores.
A su turno, y desde su hogar, el presidente del Centro de Veteranos de Guerra Islas Malvinas, Jorge Aisama, habló en nombre de los ex combatientes y pidió que “como sociedad, no olvidemos jamás a los que dieron su vida en pos de esta causa, que es la causa nacional. Espero que algún día nuestras islas estén en posesión de Argentina, y que eso se logre solo por la vía diplomática”.
Finalmente, también hizo uso de la palabra Jofré Giraudo, quien también vinculó la fecha con el desafío de la pandemia: “Estamos en estos días en una nueva guerra, no contra una nación sino contra un enemigo común de la humanidad, el virus”, comenzó, y aseguró que esta situación “nos ha traído un olvido momentáneo de las diferencias”.
El obispo pidió “sacar luz de la dolorosa experiencia de Malvinas”. En este sentido, apuntó que “los heroísmos individuales no son suficientes”, sino que se hacen falta “la disciplina social, la planificación racional de nuestra vida común y una abnegada generosidad cotidiana de los ciudadanos para hacer que esa vida social sea posible en las difíciles condiciones en que nos encontramos. Esas son las armas del triunfo en el combate por la paz y el bien común de nuestra Patria”.
Desde sus hogares, quienes siguieron el acto entonaron las estrofas del Himno Nacional en la apertura, para cerrar con la Marcha de Malvinas. Además, se leyeron los nombres de todos los ex combatientes villamarienses y se recordó a los dos héroes que quedaron para siempre en el archipiélago: Norberto Güizzo y Adrián Busto.